lunes, 7 de marzo de 2016

Liga china arranca con fichajes galácticos y una nueva aventura

La Superliga de fútbol china comenzó el viernes una nueva temporada con unos fichajes estratosféricos que han reventado el mercado de invierno europeo y amenaza con seguir cobrando popularidad además de calidad.

El argentino Ezequiel Lavezzi, los colombianos Jackson Martínez y Fredy Guarín o el marfileño Gervinho son algunas de las grandes novedades de la competición, que en los últimos cinco años ha sido ganada por el Guangzhou Evergrande pero este año podría estar más abierta, a la vista de las fuertes inversiones de sus rivales.

"En principio, parece que va a ser una liga muy competida", destacó el jugador español Gregorio Manzano, quien vaticinó que el grupo de equipos que lucharán por los puestos de cabeza será mayor que en otros años.

A los favoritos en temporadas anteriores, como el Evergrande, el Beijing Guoan, el Shanghai SIPG y el Shandong Luneng, se les pueden unir en 2016 otros clubes en ascenso como el Jiangsu Suning, el Hebei Fortuneo y el Shenhua.

El Evergrande, entrenado desde el pasado año por el brasileño Luiz Felipe Scolari y que también es el vigente campeón de la Liga de Campeones asiática, es en todo caso el gran favorito, pese a haber perdido a una de sus estrellas, el delantero brasileño Elkeson, fichado por Shanghai SIPG de Sven-Goran Eriksson.

Para paliar la marcha de Elkeson al a priori gran rival (el SIPG fue subcampeón en 2015), el Evergrande acudió por primera vez a la liga española y adquirió en febrero al que el pasado verano fuera fichaje estrella del Atlético de Madrid español, el colombiano Jackson Martínez, por 42 millones de euros.

Esta temporada, sin embargo, son dos equipos aparentemente modestos, el Jiangsu Sainty y el Hebei Fortune, los que han causado mayores sorpresas.

El Jiangsu, dirigido por el rumano Dan Petrescu, se ha llevado por 50 millones de euros (récord nacional y uno de los 20 fichajes más caros en la historia del fútbol mundial) al centrocampista Alex Teixeira, y desembolsó 28 millones más por su compatriota Ramires, cifras solo comparables a las del fútbol europeo.

El Hebei Fortune, recién ascendido a primera división, ha gastado considerablemente menos pero ha conseguido atraer a futbolistas de fama como Lavezzi, Gervinho, el camerunés M´bia o el francés Kakuta.

Otros equipos a tener en cuenta son el Shandong Luneng, tercero el año pasado y que ha reforzado su defensa con el brasileño Gil o el Beijing Guoan, que ha "desguazado" al Corinthians, último campeón de la liga brasileña, con el fichaje de sus estrellas Renato Augusto y Ralf.

Ambos clubes han cambiado también sus banquillos: el Luneng ha contratado al brasileño Mano Menezes, y el pequinés se llevó al italiano Alberto Zaccheroni.


Martins hace un gol, pero su equipo chino pierde



El delantero boliviano Marcelo Martins convirtió ayer para el Changchun Yatai en la derrota de su equipo ante el Hangzhou Greentown (2-1) por la primera jornada de la Superliga China.

Martins, quien milita en el fútbol asiático desde principios de 2015, anotó a los 25 minutos del segundo tiempo, de cabeza, tras un centro desde la izquierda.

Sin embargo, este gol no fue suficiente para que su club consiguiera un mejor resultado, ya que en la primera mitad el cuadro local había convertido dos goles: Chen Po-Liang (abrió el marcador a los tres minutos y el australiano Tim Cahill definió de penal a los 20’).

En la segunda fecha (el sábado) el Changchun Yatai no la tendrá nada fácil, pues se enfrentará con el vigente campeón, el Guangzhou Evergrande, dirigido por el brasileño Luiz Felipe Scolari, quien tiene en su plantilla a estrellas como el delantero colombiano Jackson Martínez.

sábado, 5 de marzo de 2016

La SuperLiga de China se llena de estrellas mundiales

La Superliga de fútbol china comienza este fin de semana una nueva temporada con unos fichajes estratosféricos que han reventado el mercado de invierno europeo y el aliciente de seguir viendo en ella al español Gregorio Manzano, quien tras dos años entrenando en Pekín ahora probará suerte en la rival Shanghái.

El argentino Ezequiel Lavezzi, los colombianos Jackson Martínez y Fredy Guarín o el marfileño Gervinho son algunas de las grandes novedades de la competición, que en los últimos cinco años ha sido ganada por el Guangzhou Evergrande pero este año podría estar más abierta, a la vista de las fuertes inversiones de sus rivales.

"En principio, parece que va a ser una liga muy competida", destacó a EFE Manzano, quien vaticinó que el grupo de equipos que lucharán por los puestos de cabeza será mayor que en otros años y expresó su esperanza de que su nuevo club, el Shanghai Shenhua (sexto en la pasada temporada) esté en esa pomada.

A los favoritos en temporadas anteriores, como el Evergrande, el Beijing Guoan (que Manzano entrenó en 2014 y 2015), el Shanghai SIPG y el Shandong Luneng, se les pueden unir en 2016 otros clubes en ascenso "como el Jiangsu Suning, el Hebei Fortune o nosotros", señaló el jienense en referencia al Shenhua.

El Evergrande, entrenado desde el pasado año por el brasileño Luiz Felipe Scolari y que también es el vigente campeón de la Liga de Campeones asiática, es en todo caso el gran favorito, pese a haber perdido a una de sus estrellas, el delantero brasileño Elkeson, fichado por el Shanghai SIPG de Sven-Goran Eriksson.

Para paliar la marcha Elkeson al a priori gran rival (el SIPG fue subcampeón en 2015), el Evergrande acudió por primera vez a la liga española y adquirió en febrero al que el pasado verano fuera fichaje estrella del Atlético de Madrid, el delantero colombiano Jackson Martínez, por 42 millones de euros.

Esta temporada, sin embargo, son dos equipos aparentemente modestos, el Jiangsu Sainty y el Hebei Fortune, los que han causado mayores sorpresas en el mercado de fichajes chino.

El Jiangsu, dirigido por el rumano Dan Petrescu, se ha traído por 50 millones de euros al centrocampista Alex Teixeira, y desembolsó 28 millones más por su compatriota Ramires.

El Hebei Fortune, recién ascendido a primera división, ha gastado considerablemente menos pero ha conseguido atraer a futbolistas de fama como Lavezzi, Gervinho, el camerunés M'bia o el francés Kakuta.

El Luneng ha contratado al exseleccionador brasileño Mano Menezes, y el conjunto pequinés trajo al italiano Alberto Zaccheroni.



viernes, 4 de marzo de 2016

La Super League china iniciará con mucho brillo

Alex Teixeira, Ezequiel Lavezzi, Gervinho, Jackson Martínez... El campeonato chino de fútbol comienza el viernes la temporada 2016 bajo el brillo de sus nuevas estrellas extranjeras, recrutadas a precio de oro.

La ambiciosa Super League (CSL) ha desembolsado 331 millones de euros, según el portal Transfermarkt, en la adquisición de 163 nuevos jugadores, superando en cuatro ocasiones el traspaso récord pagado por un futbolista en el gigante asiático y en todo el continente.

Por primera vez en la historia del fútbol el campeonato chino ha eclipsado a sus homólogos europeos, incluso a la ostentosa Premier League inglesa, que 'sólo' ha gastado 253 millones de euros en el mismo período.

Los equipos chinos han arrebatado a dos jugadores pretendidos por los clubes ingleses Liverpool y Chelsea, interesados en los delanteros Alex Teixeira (50 millones de euros) y Jackson Martínez (42 millones de euros). También ha atraído al argentino Ezequiel Lavezzi, procedente del París SG, al brasileño Ramires, del Chelsea, o al marfileño ex de la Roma Gervinho.

Para la temporada 2016 se postulan como claros favoritos el vigente campeón del país y de Asia, el Guangzhou Evergrande del brasileño Luiz Felipe Scolari, y el Shanghai SIPG del sueco Sven-Goran Eriksson.

Las estrellas, a falta de que demuestren su precio sobre el terreno de juego, han conseguido suscitar el interés de los aficionados chinos por el campeonato local. "Todo el mundo en China habla de la Liga, los compañeros de trabajo, los amigos, la gente mayor por la calle", constata Ma Zheng, de 33 años, aficionado del Shanghai. "Tenemos la impresión de que el fútbol chino va a volver a ser interesante, después de que los chinos lo mirasen de reojo desde hace muchos años".

Luces y sombras

La 'nueva' CSL se presenta como una competición glamurosa y atractiva que ha sabido olvidar su imagen de campeonato corrompido, tras un escándalo de gran amplitud que implicó a numerosos dirigentes, jugadores, y árbitros en 2010.

Desde entonces, los propietarios de clubes aplicaron al pie de la letra las consignas dictadas por las autoridades políticas del país tendentes a situar a la China como una potencia futbolística mundial.

El presidente chino Xi Jinping, aficionado declarado del fútbol, espera ver a su país organizar y ganar un día la Copa del Mundo. Pero el destello de las estrellas del balón no oculta algunos problemas.

Hong Kong ha prohibido las apuestas sobre el campeonato chino, evocando sus dudas "sobre su transparencia, su integridad y su competitividad".

Algunos aficionados chinos se cuestionan sobre si ese desembarco masivo de jugadores extranjeros, sobre todo procedentes de Sudamérica, podría restar oportunidades a los futbolistas del país, lo que a la larga perjudicaría a la selección nacional, que sólo ha disputado un Mundial en su historia y está casi descartada en la carrera para Rusia-2018.

"Soy feliz por ver cada vez más jugadores célebres venir a China y mejorar el nivel de nuestra liga, pero me pregunto si no impedirán que los chinos gocen de minutos sobre el terreno de juego", afirma preocupado Li Jun, un oficinista de la capital, Pekín.